ÁREAS DE INVERSIÓN EN EL HOGAR

"El amor a la economía es la raíz de toda la virtud." Anónimo

Invertir en el hogar significa aprovechar los recursos disponibles de la mejor manera posible, a fin de incrementar lo que se tiene en el presente para vivir con más calidad, preparando situaciones futuras como la educación de los hijos, el patrimonio y el retiro. Pero, ¿cómo saber dónde invertir? El plan financiero es una herramienta que puede ayudarte a trazar un horizonte en distintas etapas. Incluye cuatro pasos: presupuestar, ahorrar, producir e invertir.

LA UTILIDAD DEL PRESUPUESTO

Para empezar a organizar tus finanzas, es importante:

• Determinar un periodo de tiempo (semana, mes, quincena).
• Hacer una lista con todos los gastos que tienes pensado hacer.
• Clasificarlos con base en tus prioridades para que puedas atender las necesidades y deseos personales y familiares.
• Registrarlos, a fin de que al final del periodo puedas revisar si la distribución de tu dinero fue como la habías planeado.
• Revisar y analizar con frecuencia tu presupuesto para hacerle las modificaciones que convengan a tus intereses, de acuerdo con tus ingresos y gastos.

El poder del ahorro: otra herramienta que forma parte fundamental de tu plan financiero —te ayuda a alcanzar tus metas y objetivos— es el ahorro. Anótalo como un rubro fijo dentro de tu presupuesto para que te ayude a cumplir tus metas de inversión personales o familiares. Puedes iniciar a ahorrar pequeñas cantidades de dinero, pero constantes, obtenidas de disminuir o sacrificar algunos gastos que no son prioritarios. Tu ahorro puede servir de columna vertebral para futuras inversiones.

La creatividad productiva: tu creatividad y la de tu familia puede ser generadora de dinero extra. Invertir tu tiempo en ideas, como vender algo hecho en casa (arreglos navideños, pasteles, el remate de artículos de segunda mano) puede resultar un gran éxito y, más aún, puede traerte beneficios económicos. Si estas ideas se traducen en acciones, generalmente los resultados ayudan a nuestros bolsillos.

Invertir es sembrar: recuerda  que para cosechar es necesario cuidar la etapa de cultivo. Lo mismo sucede con las inversiones. Haz un análisis y elígelas pensando en lo que quieres para tu futuro y el de tu familia.  

El dinero es un recurso que nos ayuda a construir nuestro plan de vida y que  brinda bienestar en la medida en que lo administramos a nuestro favor. Por ello, es importante aprovecharlo al máximo. Una inversión generalmente requiere de una compra, pero es para adquirir un bien destinado a generar beneficios. Parte de aquello que consideras que es importante en tu familia para decidir cuál es tu proyecto de inversión. Revisa las necesidades y deseos en tu hogar y planea cómo puedes ir adquiriendo aquello que mejora y beneficia tu futuro.

Algunas sugerencias de inversión en casa, basadas en el ahorro en especie:

Tecnología amigable con el medio ambiente: te ayuda a consumir menos luz, agua o gas. Ejemplo: usar focos de bajo consumo.

Arquitectura inteligente o domótica: aprovecha al máximo los recursos, desde la construcción y materiales para reemplazar la luz y el calor artificial por natural, economizando energía y dinero en refrigeración, aire acondicionado, calefacción.