Para consumir consciente y responsablemente es posible llevar a cabo algunas acciones, que en un principio te resultarán nuevas, pero que podrás realizarlas fácilmente cuando tengas mayor práctica. Los beneficios se verán reflejados en tu economía personal y familiar.
A través del siguiente relato, te mostramos cuáles son los pasos a seguir:
A la familia Fernández le encanta comer muy bien, pero con “muy bien” nos referimos a variedad, cantidad y abundancia... sin importar el precio.
Su lema es “con la alacena llena, no importa lo que venga”. Pero “lo que venga”... ya llegó, y el señor y la señora Fernández están gastando mucho más de lo que reciben por su trabajo, dejando de lado gastos importantes porque el dinero ya no les alcanza, y mucha de la comida que compran inclusive se les echa a perder.
Hoy se han reunido todos porque desean hacer las modificaciones necesarias para ajustar sus gastos a sus ingresos sin sacrificar cosas importantes.
La señora Fernández sugiere que lo primero que deben cuestionarse es si están gastando por necesidad o por deseo. ¿Cuál es su principal motivo para comprar tanta comida?
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